La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ajusta montos para fiscalizar transacciones y duplica reintegros en compras con tarjeta de débito.
En una movida destinada a fortalecer el control tributario y la transparencia en las operaciones financieras, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ha anunciado un cambio significativo en los montos a partir de los cuales se revisarán los movimientos realizados con tarjetas de débito. La medida busca adaptarse a la realidad económica y al crecimiento del uso de billeteras virtuales en los últimos tiempos.
Mediante la recién publicada Resolución General 5348/2023, la AFIP ha establecido un nuevo límite para la supervisión de consumos realizados con tarjetas de débito: a partir de ahora, se comenzará a investigar cuando los gastos alcancen o superen los $120.000. Esta cifra representa un notable aumento con respecto al límite anterior, que se encontraba en $30.000. Al requerir que las instituciones financieras proporcionen información detallada sobre estos movimientos, la AFIP busca fortalecer la administración tributaria y mejorar el control sobre las transacciones con tarjetas de débito.
Junto a este ajuste en la fiscalización, la AFIP ha tomado otra medida que beneficiará a varios sectores de la población. A partir del 1 de julio de este año y hasta el 31 de diciembre, la entidad ha duplicado el monto de reintegro del 15% para las compras realizadas con tarjetas de débito. Este beneficio se aplica a jubilados, pensionados, titulares de la Asignación Universal por Hijo, Asignación Universal por Embarazo y aquellos que perciben el haber mínimo.
Es importante destacar que estos reintegros tienen un tope mensual de $4.056 por beneficiario, con la posibilidad de llegar hasta $8.114 para aquellos que sean beneficiarios de dos o más prestaciones. Esta medida no solo incentiva el uso de la tarjeta de débito como medio de pago, sino que también brinda un alivio financiero adicional a aquellos sectores que más lo necesitan.