Los DAI de San Juan marcharon alrededor de la Plaza 25 de Mayo exclamando que las condiciones de trabajo son inferiores al resto.
En una muestra de determinación y unidad, los Docentes Auxiliares Integradoras (DAI) de San Juan se congregaron en la Plaza 25 de Mayo este viernes para expresar su exigencia de ser oficialmente reconocidos por el Ministerio de Educación. Esta movilización se produce en medio de crecientes preocupaciones sobre sus condiciones laborales y salarios, que consideran inferiores en comparación con otros profesionales de la educación.
Los DAI, que desempeñan un papel vital en el sistema educativo al brindar apoyo a estudiantes con discapacidades, han denunciado que sus sueldos y condiciones laborales actuales dependen del Ministerio de Desarrollo Humano, obras sociales o fundaciones. Esta situación ha resultado en salarios que están por debajo de la canasta básica, según sus afirmaciones.
Giselle De Bella, una de las manifestantes, declaró: “Necesitamos resoluciones que amparen nuestro trabajo y que se empiecen a cumplir. Que se reconozca que la persona con discapacidad es una persona de derecho”. La falta de reconocimiento por parte del Ministerio de Educación ha llevado a la mayoría de los DAI a tener sueldos insuficientes, sin vacaciones pagas, incapaces de tomar días por enfermedad y, en algunos casos, trabajando en la informalidad debido a la ausencia de aportes jubilatorios y seguridad social.
Uno de los principales reclamos es que desean ser reconocidos como docentes con igualdad de condiciones laborales en comparación con sus colegas y aspiran a un salario base superior al que están recibiendo actualmente.
Matías Olmedo, otro de los trabajadores que lideró la manifestación, señaló que, según el nomenclador nacional del Ministerio de Educación de la Nación, un DAI debería recibir al menos $115,000 al mes. Sin embargo, en la actualidad, las obras sociales no cumplen consistentemente con este estándar. Además, existe una confusión en cuanto a las responsabilidades ministeriales, ya que, mientras a nivel nacional el monto salarial es fijado por el Ministerio de Educación, las obras sociales dependen del Ministerio de Salud.
En un intento de ayudar a las familias que carecen de una obra social en San Juan, la provincia ha implementado un subsidio de $67,000 a cargo del Ministerio de Desarrollo Humano. Sin embargo, en la mayoría de los casos, las familias no pueden cubrir la diferencia restante. Matías Olmedo explicó: “Entendemos la situación de las familias y sabemos que, en muchos casos, no pueden pagar. Pero muchos de nosotros tenemos nuestras propias familias, incluyendo madres solteras, y ganamos salarios muy bajos. A menudo, incluso invertimos dinero de nuestro propio bolsillo para comprar materiales y ayudar a los niños”.
Es importante destacar que la obtención de este subsidio está sujeta a la evaluación previa de las autoridades de cada institución, lo que genera incertidumbre para los padres y los DAI. Además, una parte del subsidio se destina al pago del monotributo de AFIP, ya que cada docente debe facturar los pagos que reciben por cada niño bajo su cuidado.