Kamala Harris, la actual vicepresidenta de Estados Unidos y pionera en la política estadounidense, recibe el respaldo de Joe Biden y destacados líderes del partido Demócrata para liderar la fórmula presidencial en las elecciones del 5 de noviembre, enfrentando a Donald Trump.
Kamala Harris se perfila como la principal candidata para reemplazar a Joe Biden en la presidencia de la fórmula demócrata para las elecciones del 5 de noviembre. La actual vicepresidenta, la primera mujer en ocupar este cargo en la historia de Estados Unidos, ha recibido el respaldo explícito de Biden para liderar la misión de derrotar a Donald Trump en la contienda electoral.El destino de Harris como candidata presidencial se decidirá en la convención demócrata que se llevará a cabo en Chicago el 19 de agosto, donde se reunirán los 3900 delegados del partido. A pesar de la competencia de otros referentes, como el gobernador de California, Gavin Newsom, y otros líderes del partido, la mayoría de los analistas consideran que Harris tiene una ventaja significativa.En un mensaje publicado en su cuenta de X, Biden expresó: “Hoy quiero ofrecer mi completo respaldo a Kamala para ser designada en nuestro partido este año. Demócratas: es hora de ir juntos y caminar para derrotar a Trump. Vamos a hacerlo.” Este respaldo llega tras la presión interna que enfrentó Biden respecto a su reelección, debido a preocupaciones sobre su salud y estado mental.Bill y Hillary Clinton también se unieron al apoyo de Harris, destacando su historial como pionera en la política estadounidense. A los 59 años, Harris ha roto barreras significativas: fue la primera mujer en liderar la fiscalía del Estado de California, la primera mujer negra californiana en el Senado, y la segunda mujer negra en el Senado estadounidense en la historia del país.Sin embargo, según el analista Jorge Castro, Harris podría enfrentar aún más dificultades que Biden para vencer a Trump, dado que los votos en las primarias fueron mayormente para Biden. Castro señala que la continuidad de Harris representa la opción más práctica para los demócratas, evitando una elección interna riesgosa dentro de la convención.Con su historial de romper barreras y su apoyo interno sólido, Kamala Harris se prepara para enfrentar una de las contiendas electorales más desafiantes de la historia reciente de Estados Unidos.