En San Juan, al igual que en todo el país, cada 18 de mayo se conmemora el Día de la Escarapela Nacional, un símbolo patrio que tuvo su origen en decisiones de la Asamblea General Constituyente de 1813. Este emblema fue creado el 18 de febrero de 1812 por solicitud de Manuel Belgrano al Primer Triunvirato, buscando unificar los colores del ejército y distinguirlo de los enemigos.
La escarapela fue una de las tantas decisiones históricas que marcó el camino hacia la independencia. Entre otras medidas importantes tomadas por la Asamblea se encuentran la Libertad de Vientres, la abolición de la Inquisición y la eliminación de títulos de nobleza. San Juan conserva documentos originales de este período en su Archivo General de la Provincia.
Uno de estos documentos, fechado el 18 de febrero de 1812, declara el uso oficial de la escarapela de dos colores, blanco y azul celeste, y deja sin efecto el uso del color rojo. El mismo fue firmado por figuras históricas como Feliciano Chiclana, Manuel de Sarratea y Bernardino Rivadavia, y dirigido al Gobierno de San Juan.
Posteriormente, en 1935, el Consejo Nacional de Educación instituyó el 18 de mayo como el Día de la Escarapela. En San Juan se realizan actividades escolares y oficiales para rendir homenaje a este símbolo tan significativo.
La identidad nacional se forjó con gestos y decisiones como estas, y San Juan forma parte activa de esa historia, resguardando documentos y promoviendo el conocimiento de nuestro pasado patrio.