Claudia Sheinbaum, respaldada por una amplia mayoría, se convierte en la primera mujer presidenta de México tras arrasar en las elecciones del domingo. Su victoria marca un hito en la política mexicana y promete continuidad con el legado de López Obrador
Claudia Sheinbaum hizo historia al convertirse en la primera mujer presidenta de México, tras una contundente victoria en las elecciones del domingo. La científica de 61 años, respaldada por el partido oficialista Morena, obtuvo entre el 58.3% y el 60.7% de los votos, según un conteo rápido del árbitro electoral.
En su discurso de aceptación, Sheinbaum prometió gobernar para todos los mexicanos, independientemente de su afiliación política, y anunció su compromiso de continuar el legado del presidente Andrés Manuel López Obrador, con ajustes destinados a abordar la violencia relacionada con el crimen organizado, reducir la deuda pública, impulsar la economía y combatir la corrupción.
La exalcaldesa de la Ciudad de México expresó su gratitud por el apoyo recibido y destacó que su victoria representa el reconocimiento del pueblo mexicano a su proyecto de nación. Con esta elección, el partido Morena y sus aliados aseguran la mayoría calificada en ambas cámaras del Congreso, lo que les otorga la capacidad de realizar cambios constitucionales.
La jornada electoral estuvo marcada por la sombra de la violencia, con un récord de casi 40 aspirantes asesinados, lo que ha suscitado preocupaciones sobre el estado de la democracia en el país. Sin embargo, Sheinbaum y su contrincante más cercana, Xóchitl Gálvez, coincidieron en la necesidad de unir esfuerzos para abordar los desafíos que enfrenta México.
Además, el partido oficialista Morena también celebró victorias en otros frentes, incluida la Ciudad de México, donde su candidata Clara Brugada se alzó con la victoria, consolidando así el dominio de la izquierda en la capital desde 1997
