La semana pasada se conoció el dato de inflación de junio, que según el Índice de precios al consumidor (IPC) que publica el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), se ubicó en el 6%, mientras que, en los últimos 12 meses, alcanzó el 115,6%.
Fueron datos mejores a los esperados, aunque se mantienen elevados, y eso obliga a recalcular carteras. Por eso, con esta información sobre la mesa, los analistas de la City evalúan cuáles son las mejores opciones de inversión de cara a las elecciones primarias (PASO)
Para Javier Marcus, gerente de Negocios en Suthern Trust, por ejemplo, “la desaceleración de la inflación de junio podría ser una oportunidad para aporta a los activos que ajustan por CER” y es que considera que este dato del IPC “da un punto de entrada mejor” para ese tipo de inversiones.
Plazo fijo: las tasas son una opción
Sin embargo, por otro lado, menciona que hay que tener en cuenta el hecho de que las tasas fijas se hacen más atractivas también tras el dato de precios de junio. Y es que, el directorio del BCRA decidió mantener sin cambios los rendimientos de los instrumentos regulados, luego de que por segundo mes consecutivo la inflación mensual registrara una significativa desaceleración respecto del mes previo.
De este modo, el Banco Central mantuvo la tasa nominal anual (TNA) del plazo fijo tradicional en el 97%, lo que equivale a un rendimiento efectivo mensual es del 8% y eso, con una inflación en el 6%, implica que queda positiva en 2 puntos porcentuales.
En consecuencia, la economista de Grupo Broda Elena Alonso señala que, “con el dato de inflación de junio en la mesa, éste es un buen momento pata aprovechar la tasa de interés, que no bajó”. El plazo fijo aparece, así, como una buena opción, pero la analista asegura que ella prefiere comprar Letras del Tesoro, como Ledes o Lecers.
“Hay unas Lede que vencen el 28 de julio y unas Lecer que vence a mediados de agosto, por ejemplo, y me parecen alternativas interesantes dado que tienen más posibilidad de liquidez que el plazo fijo en el corto plazo”, menciona Alonso. Y explica que esta mayor liquidez es una buena oportunidad que ayuda a no quedar desfasado respecto del dólar en caso de que haya un salto fuerte, como el de la semana pasada, por ejemplo.
La dolarización: una alternativa interesante
En tanto, a largo plazo, Alonso ve como una buena opción dolarizarse vía Cedears u obligaciones negociables. “Creo que son buenas opciones por más que el costo de la tasa para entrar sea alto”, menciona. Y es que la dolarización de carteras es una de las estrategias a la que más apuntan los argentinos habitualmente en un contexto electoral, como el actual.
El experto en mercados bursátiles Marcelo Bastante coincide con esta visión al señalar que, si bien, por un lado, las acciones argentinas pueden seguir con tendencia alcista, aunque no tan fuerte como hemos visto a lo largo de los últimos meses, se está empezando a despertar el dólar. Y, en ese contexto, opina que “las inversiones en pesos resultan menos atractivas de lo que eran hasta ahora”.
En consecuencia, Bastante ve con buenos ojos la deuda soberana en dólares, que está en valores muy bajos. “Algunos bonos están con paridades muy convenientes, cercanas al 30% y con una TIR del 40%, por lo que son opciones interesantes”, apunta. Y no considera una buena opción apostar a la deuda en pesos, dado que es imprevisible lo que pueda pasar con el tipo de cambio hacia adelante en el contexto electoral.
Una cartera diversificada
Así, tal como apunta Marcus y teniendo en cuenta las distintas opciones que hay para elegir y la alta volatilidad de la inflación, “todo indicaría que lo mejor es constituir carteras diversificadas tanto en tipos de instrumentos”. Una opción son los fondos comunes de inversión, como alguno de infraestructura que, en el caso de Southern Trust, por ejemplo, tiene un cuarto que ajusta por inflación, pero también incluye activos badlar, dollar linked y hard dollar para tener una cobertura más amplia.