San Juan disfrutó de un fin de semana largo exitoso con una ocupación hotelera del 84%, generando un impacto económico de casi $472 millones.
Durante el pasado fin de semana largo, la provincia de San Juan vivió un auténtico auge turístico con un impresionante 84% de ocupación hotelera, dejando un impacto económico estimado en $471.665.793,03, según informó el Ministerio de Turismo y Cultura a través de su Departamento de Estadísticas.
Los números revelados por el informe son realmente notables, con varias regiones de San Juan liderando la lista en ocupación. Calingasta se destacó con un sorprendente 93% de ocupación, seguido de cerca por Valle Fértil con un 90%, Jáchal con un 89%, Iglesia con un respetable 85%, y el Gran San Juan, la capital provincial, registró un sólido 77% de ocupación. Estos datos no solo reflejan la creciente popularidad del turismo local, sino que también muestran un fuerte impulso económico en la región.
Lo que hace que este auge turístico sea aún más impactante es la diversidad de lugares de origen de los visitantes. Turistas llegaron a San Juan desde Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos, La Pampa, Mendoza, San Luis, Santa Fe y otras provincias, lo que subraya la atracción de la provincia como un destino turístico emergente para viajeros de todo el país.
El éxito del fin de semana largo se vio reforzado por una vibrante agenda cultural que ofreció una amplia gama de eventos para todos los gustos. Desde emocionantes propuestas teatrales, como “Un Loco Experimento” en el prestigioso Teatro del Bicentenario, hasta espectáculos musicales que incluyeron un conmovedor homenaje a Aretha Franklin en el Auditorio Juan Victoria. La oferta cultural fue rica y diversa, atrayendo a un público variado.
Entre las actividades que atrajeron a la mayoría de los turistas, destacan el 1° Festival Internacional de Música, el 16° Encuentro Nacional de Falcon, y el emocionante Encuentro Latinoamericano de Estudiantes de Arquitectura.
Además, la Feria de Artesanías en los jardines del Mercado Artesanal Tradicional Luisa Escudero se mantuvo como un punto focal para los visitantes, ofreciéndoles una oportunidad adicional de disfrutar y adquirir productos artesanales locales, lo que contribuyó aún más a la economía local.
