Los jóvenes usaron la última hora de la jornada escolar para concentrarse y realizar el reclamo.
Los alumnos de la Escuela Normal Sarmiento este martes al mediodía se organizaron para llevar adelante un reclamo por la falta de agua e higiene en los baños. Los jóvenes aseguraron que desde comienzo de año están teniendo problemas con el suministro.
A su vez, algunos de ellos manifestaron una serie de problemas con preceptores y la falta de atención a sus pedidos por parte de las autoridades.
Pasadas las 11.30, los alumnos de 1º a 6º año de la Normal Sarmiento se organizaron para no ingresar a la última hora de clases y realizar una sentada con cánticos y aplausos pidiendo una pronta solución a la falta de agua en los sanitarios.
“Esta situación viene desde la semana pasada, pero desde inicio de clases tenemos problemas con la falta de higiene de los baños.
Cuando queremos reclamar no nos escuchan, por eso hacemos esto”, dijo el alumno Samuel Bigaíl
Sumado al pedido, el joven explicó a este medio que desde hace un tiempo varios alumnos de la institución tienen conflictos con algunos de los preceptores y autoridades de la institución.
“En nuestro caso, tenemos una compañera a la que nuestra preceptora le habló mal y la hizo llorar.
Cuando hacemos llegar este reclamo, nadie nos escucha, no nos dan bola”, aseguró el alumno.
La palabra de las Autoridades.
María Elvira Nadal Hernández, subjefa de preceptores, explicó que el inconveniente con el faltante de agua se debe a que el día viernes cerraron las llaves de las bombas encargadas de llenar los tanques y con el fin de semana largo, en la jornada de hoy no tuvieron tiempo de llenarse.
“Gente del obrador estuvo trabajando en problemas de filtraciones en los baños y posiblemente hayan dejado sin darse cuenta las llaves cerradas”, indicó.
En cuanto a los presuntos maltratos que denunciaron los alumnos, la docente aseguró que no existe tal situación y que por el contrario son ellos quienes reciben maltrato tanto por parte del alumnado como los padres.
“Los chicos están en una edad en que la rebeldía es su orden de vida. Nosotros exigimos que se use el uniforme correspondiente y como pueden ver son muy pocos los que acatan esa normativa que está impuesta en el reglamento, esto genera discusiones en más de una oportunidad”, concluyó Hernández.
